¡Qué tal amigos! Me llena de muchísima energía traerles el blog oficial de los “Being Builders”.
En la sección de hoy veremos los 5 errores más comunes que te pueden suceder al empezar o regresar a entrenar pasando los 40 años.
Número 1: Siempre antes de iniciar o regresar a entrenar es de suma importancia que chequemos como nos encontramos actualmente. Muchas veces creemos que seguimos teniendo 20 años y que, por lo tanto, nuestro cuerpo responderá de esa forma. Así que, comenzamos con 3 revisiones base que yo recomiendo.
a) Chequeo médico de sangre, revisar colesterol y hormonas.
b) Ecográfica Carotídea
c) Electrocardiograma
Si no tienes experiencia interpretando dichos estudios, entrenando y conociendo qué alimentación es favorable para ti, requieres un asesor multidisciplinario para tus actividades físicas.
2.- El segundo error es querer llevar a cabo el mismo estilo de vida (el de antes de entrenar) cuando ya estás entrenando. Le vas a exigir mayor esfuerzo a tu cuerpo, por lo tanto, la alimentación tiene que ser de calidad para mantener el ritmo de vida.
Pasando los 40 debemos dejar de comer fregaderas, piensa como si el cuerpo fuera un auto: A mayor tiempo de uso, mayores cuidados necesita. En consecuencia, nuestro cuerpo funciona de la misma manera, al querer arrancar nuestro motor necesitamos gasolina de la mejor calidad posible.
3.- Calma tu ímpetu: Conoce y comprende tu cuerpo, por más energía que tengas de querer hacer un cambio, recuerda que es un proceso. No quieras tener cambios rápidos y no te compares con los demás. Entiende que es un proceso personal y que cada quien va a su ritmo dependiendo de sus necesidades.
4.- Cree en ti mismo y no creas en obstáculos. Tu progreso físico es una combinación entre tu disciplina (al entrenar y alimentarte) y tu estado emocional (motivación). Si en la mente traemos chingaderas de sentimientos, nos vamos a contaminar y solitos nos vamos a poner obstáculos en nuestro progreso personal del cual estamos hablando en el punto anterior. No solo es tratar de nutrirnos mejor físicamente, también se trata de la nutrición mental.
5.- Seleccionar los ejercicios con base a tus necesidades. Recuerda que antes de hacer una rutina, tienes que asegurarte que sea la que tu cuerpo necesite y no solo porque viste que le funcionó a alguien significa que tendrá los mismos efectos contigo. Además de que todos los cuerpos funcionamos diferente, reitero que si no tienes experiencia entrenando y en la cultura física, necesitas de un asesor multidisciplinario (coach) para saber que ejercicios son los mejores a tus capacidades.